
La Secretaría de Salud (SESA) del Estado de Querétaro informa que, con el propósito de fomentar la detección oportuna del cáncer de mama, se recomienda a las mujeres a partir de los 20 años realizar de manera regular la autoexploración mamaria, con el fin de identificar de forma oportuna cualquier cambio o anomalía.
Consiste en examinar física y visualmente las mamas para conocer como es su forma, textura y consistencia, lo que permitirá detectar a tiempo posibles anomalías, y que se debe realizar una vez al mes.
Para lo anterior, se aconseja elegir un día determinado del mes. El mejor momento para realizarla es siete o diez días después del comienzo de la menstruación, ya que es menos probable que las mamas estén adoloridas o inflamadas. En la postmenopausia se puede elegir un día fijo del mes para recordar el control de la autoexploración.
La autoexploración mamaria siempre debe incluir la inspección visual frente a un espejo para advertir cualquier cambio de contorno o textura, y la inspección manual de pie y recostada, para observar protuberancias o engrosamientos inusuales.
La técnica es la siguiente:
1. Frente al espejo, desvestida hasta la cintura, con los brazos a los lados del cuerpo, observa las mamas detalladamente y observar si existen posibles cambios en ellas, como abultamiento, hundimiento, zonas corrugadas, enrojecidas o con cambios de color. De la misma manera observar el pezón descartando desviaciones o hundimientos.
2. Levantar los brazos y observar de frente y de lado, girando suavemente el cuerpo de un lado al otro.
3. Con una mano levantar la mama contraria, de tal manera que se pueda observar su parte inferior y volver a observar detenidamente.
4. Colocar las manos en las caderas y presionar de forma firme con los brazos, inclinarse un poco hacia adelante, en esta posición observar posibles cambios en la piel o desviación del pezón.
5. Palpar las mamas con una mano detrás de la cabeza, usar la mano derecha para palpar la mama izquierda y viceversa.
6. Utilizar las yemas de los tres dedos del medio manteniéndolos derechos; doblando levemente los nudillos, palpar con movimientos circulares empezando por el hueco axilar, recorriendo toda la mama y terminando en el pezón buscando bultos.
7. Terminar la exploración comprimiendo el pezón y observar si existe salida de líquido anormal por esté.
8. Acostada y con una almohada bajo la espalda, colocar el brazo del lado que se va a examinar por detrás de la cabeza, palpar cada parte con movimientos circulares, desde el borde de la mama hacia el pezón. Repetir el mismo procedimiento en la otra mama, verificando que no quede ninguna zona sin palpar.
Además de la autoexploración, que se efectúa cada mes, se recomienda el examen clínico de mama, realizado por personal médico o de enfermería capacitado. Esta se debe llevar a cabo a todas las mujeres mayores de 25 años, en los Centros de Salud.