La fuerza de un tornado en Ciudad Acuña, Coahuila, dejó trece muertos, daños en más de 300 casas en un radio de 1.8 kilómetros y 290 lesionados… en seis segundos.
Las instancias municipales están rebasadas para hacer frente a los daños que dejó el tornado, por lo que urge la ayuda de los gobiernos estatal y federal para regresar lo más pronto posible a la normalidad, afirmó el presidente municipal Evaristo Lenin Pérez.
En entrevista con Adela Micha para Grupo Imagen Multimedia, afirmó que el tornado duró apenas seis segundos, que fueron suficientes para devastar una zona donde están asentadas alrededor de mil 500 viviendas de interés social.
La Coordinación Nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación (Segob) emitió una declaratoria de emergencia para el municipio de Acuña, con lo que se activan los recursos del Fondo para la Atención de Emergencias (Fonden).
El investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, Arturo Quintanar Isaias, dijo que ante la inusual aparición de estos fenómenos en México no se cuenta con el equipo y personal necesario para emitir alertas con mucha anticipación.
La Comisión Nacional del Agua Conagua (Conagua) informó que el tornado se encuentra entre las categorías F2 y F3 de la escala Fujita
El fenómeno se originó de manera aislada al sur-oeste de Acuña, con una velocidad de traslación de 50 kilómetros por hora y rachas de vientos mayores a 200 kilómetros por hora.
Por: Excelsior