La zona de Nueva Inglaterra y partes del estado de Nueva York amanecieron ayer cubiertos por una nueva capa de nieve, que amenaza con llevar a entre 30 y 60 centímetros (1 o 2 pies) la cantidad de nieve caída en algunas partes del noreste de Estados Unidos, lo que complicó el traslado al trabajo para muchos y la cancelación de vuelos en los aeropuertos de la zona.
La tormenta de nieve y granizo denominada Marcus provocó la anulación de unos 1.850 vuelos, especialmente en Nueva York y Boston, con la capital de Massachusetts especialmente afectada.
El 69% de los despegues y el 52% de los aterrizajes del aeropuerto internacional Boston Logan fueron cancelados, según el sitio especializado Flightaware, que registraba más de 500 vuelos anulados en total en esa ciudad.
En Nueva York, también había numerosas anulaciones, en especial en el aeropuerto LaGuardia, de tráfico doméstico, con 55% de los despegues y 48% de los aterrizajes cancelados (unos 600 vuelos). Newark registraba unas 300 cancelaciones y JFK unas 250, siempre según la misma fuente.
La tormenta afectaba sobre todo a Boston y la costa de Massachusetts, bajo la nieve desde el sábado. El Servicio Nacional de Meteorología emitió alertas de tormenta de nieve para el centro de Nueva York, el oeste de las montañas Catskill y buena parte de Nueva Inglaterra durante las primeras horas de hoy.
Por: elheraldo