REFORMA EDUCATIVA: ¿INSTRUCCIÓN O EDUCACIÓN?
Por Yivia Oliveri Rivera
Iniciaré este artículo con una reflexión respecto a la actual reforma educativa.
Mucho se ha cuestionado la calidad de la educación en nuestro país, la globalización mundial ha orillado al sistema educativo a portar con calzador, una reforma “educativa” que lejos de educar, instruya con la finalidad única de alcanzar indicadores que le permitan al país acceder al presupuesto de la Organización para la cooperación y desarrollo económico (OCDE). Ahora bien aquí hay varios puntos que analizar; ¿por qué aparece entrecomillada la palabra “educativa”?, ¿Es malo aspirar al apoyo económico de la OCDE?
Para entender por qué aparece entrecomillada la palabra “educativa” tendremos que definir que es la educación.
Educación proviene del griego παιδεια (paideia) que significa educación o formación, para los griegos la educación era un proceso, en donde se encuentra incluida la transmisión de valores (saber ser), saberes técnicos (saber hacer) la paideia se centraba en los elementos de la formación que harían del individuo una persona apta para ejercer sus deberes cívicos.
La educación por principio se produce en el ámbito informal, el principal, la familia y después la sociedad, por ende se tiene consciencia del tipo de individuo que se desea formar; se complementa con la educación formal (escuela) donde los saberes académicos en conjunto con las pautas morales adquiridas en casa y la comunidad, formarán a un sujeto crítico, cuidadoso de si y de su entorno, capaz de desarrollarse y a la vez generar desarrollo en su entorno.
La educación a diferencia de la instrucción busca formar individuos que desarrollen todo su potencial en favor de si y de la sociedad, no solo se inclina por saberes, sino que le interesan los valores del individuo y sus habilidades, le apuesta a la creatividad y la capacidad de raciocinio del sujeto para que alcance si total libertad.
¿Qué se busca con la reforma educativa? ¿en verdad apuesta a la libertad del individuo? ¿Cree firmemente que esa libertad proporcionará el desarrollo suficiente para la sociedad? O por el contrario, supone que dicha libertad es peligrosa y por lo tanto debe instruirlo. No muy lejos la semana pasada en sesión del congreso, el propio secretario de educación Emilio Chuayffet dijo que el docente ya NO es un formador sino un transmisor de conocimientos, un transmisor de conocimientos no tiene como propósito generar un pensamiento crítico en su auditorio, al contrario concibe al sujeto como un ser pasivo que solamente recibe lo que se le da, es entonces, lo traicionó el inconsciente y dejó ver la verdad respecto a la reforma educativa, donde el interés principal es generar técnicos que desempeñen el trabajo de otros a bajos costos sin cuestionarse su realidad, o el secretario de educación no tiene idea de lo que significa la educación.
Si el docente según Chuayffet, es un transmisor de conocimientos, entonces es un instructor, un instructor requiere menos habilidades que un formador, ahora pueden ir comprendiendo hacia donde quieren llevar a la educación con su “Reforma Educativa”. El problema de esta reforma es que no atiende a una necesidad de formación de los ciudadanos, responde a una necesidad política de indicadores neoliberales en donde el progreso y bienestar humano no son prioridad. Con esto podrán comprender que la oposición a la reforma educativa es mucho más que decir no a la evaluación docente.