Para comenzar, hay que matizar que se trata de un proyecto en desarrollo que ha levantado muchas ampollas entre diferentes laboratorios, como el del Instituto de Física de la Universidad de Tubinga, que afirma que el proyecto es poco realista, pero muchos grandes avances comenzaron con ideas alocadas, así que dejémosla evolucionar.

Las baterías que se recargan solas hacen uso de los neutrinos, que son partículas elementales eléctricamente neutras pero que pueden liberar grandes cantidades de energía cuando cuando interactúan con la materia. Esta tecnología se basa en la radiación de los neutrinos generados por el sol empleando un sistema de nanotecnología. Esta es la forma que tienen de recargar la batería por si mismas, todo un hito que no está exento de polémica.

Como extra, estas baterías, que pueden recargarse solas, al menos teóricamente, tienen una autonomía de 2.000 kilómetros, mucho más que las que nos prometen para 2020 y que tan solo duplicarán las capacidades actuales de 180 kilómetros.

Las críticas no se han hecho esperar y numerosos investigadores han puesto el grito en el cielo con frases como: ¿Un movimiento perpetuo bajo la influencia del sol? como dice un experto en energías alternativas que solicitó a Focus no ser identificado, o como afirma Stefan Reck Siegel, un físico de la Universidad Técnica de Munich, que estalla con un ¡absolutamente imposible! a lo que añade que los neutrinos interactúan muy débilmente con la materia por lo que este planteamiento es completamente imposible.

 

Por: hipertextual