A punto de finalizar 2016 y de cara a los festejos decembrinos, no es difícil que los gastos fijos como el pago de una hipoteca o un crédito se queden de lado.
Sin embargo, la situación no está para correr riesgos, con el dólar a 20 pesos y una tasa de referencia del 4.75%, dejar de pagar un crédito podría ser un duro golpe a tu estabilidad económica.
Por ello, te presentamos cuatro claves para que suceda lo que suceda, nunca dejes de pagar tu crédito:
#1 Lee las letras pequeñas
Si desde un principio no leíste las letras pequeñas de tu contrato, es hora de que las revises e investigues a fondo las condiciones de tu crédito. Recuerda que aquellos con tasa variable son más susceptibles a encarecerse en caso de existir un aumento de tasas. Si tienes alguna deuda con interés variable busca liquidarla lo antes posible.
#2 No te endeudes más
Si tienes la necesidad de adquirir un nuevo crédito, es probable que la tasa sea más alta. Trata de no endeudarte y si es inevitable, busca créditos con tasa fija y compara tus opciones para elegir las mejores condiciones posibles.
#3 Planifica un fondo de emergencia
El aumento de las tasas afecta a todos en general, tanto a particulares como a empresas, por lo que éstas últimas podrían verse afectadas seriamente llegando incluso a recortes de personal. Por eso es importante ahorrar parte de tus ingresos, para estos casos de urgencia.
#4 Busca alternativas
La consolidación de deuda puede ser una excelente opción en caso de que el monto de tu crédito se dispare.
De este modo podrás solventar contra viento y marea todos los apuros para mantener en buen nivel tu historial crediticio.
Excélsior