La magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Consuelo Rosillo Garfias comentó que continúa el desahogo de pruebas en el caso del homicidio de Yosheline Arenas Heredia, tanto por parte de la familia acusatoria, como de la defensa, por lo que continúan buscando la reclasificación del delito de homicidio calificado a simple.
Señaló que en caso de que la defensa del inculpado logre conseguir esta reclasificación la pena por delito de homicidio simple podría ser de 5 a 15 años de prisión, pero si fuera preterintencional, saldría en libertad.
«Si lo tenemos como homicidio calificado y que sería de 15 a 50 años y la defensa a lo mejor nos va a tratar de acreditar que es un homicidio simple o preterintecional, en el caso del homicidio simple la penalidad disminuye considerablemente que sería de 5 a 15 años, y en el caso del homicidio preterintencional alcanzaría algún beneficio porque es una conducta donde el sujeto no tenía la intención de privarle de la vida, pero eso ya se verá durante el proceso y no podríamos adelantar ninguna circunstancia. Incluso de libertad, pagar o conmutar la pena».
Asimismo dijo que la defensa tiene la obligación de acreditar como defensor cuales son las mejores circunstancias para su cliente, por lo tanto, podrían argumentar cualquiera de las 2 circunstancias para disminuir la pena.
POR SANDRA ALFARO.