La Escuela de Bachilleres “Salvador Allende” Plantel Amazcala entregó becas académico productivas, de manera simbólica, a nueve de los 30 alumnos que conforman la primera generación de esta unidad académica de la Universidad Autónoma de Querétaro.

Este apoyo económico consiste en mil pesos mensuales para alumnos que obtuvieron un promedio general por encima de 8 en la secundaria, por haber obtenido un buen nivel académico en el ingreso al bachillerato y por tener una buena conducta. Se espera que los recursos para continuar con esta iniciativa puedan obtenerse del propio Campus.

Además de mantener su promedio, los jóvenes tienen el compromiso de integrarse a una de las cuatro áreas productivas que se realizan en el Campus Amazcala, las cuales son: manejo de ganado bovino para la producción de lácteos, invernaderos, plantas frutales e intervención en el laboratorio clínico; durante dos horas de lunes a viernes.

En la ceremonia, la Mtra. Rosa María Vázquez Cabrera, directora de la Escuela de Bachilleres, resaltó que este proyecto redundará en un mayor aprovechamiento académico, pues impulsa a que los alumnos busquen mejorar sus calificaciones y genera el involucramiento entre docentes y estudiantes. Asimismo, exhortó a los jóvenes a tomar la responsabilidad de hacer que esta preparatoria alcance una alta calidad académica.

El Mtro. Cupertino Ramírez, coordinador del Plantel Amazcala de la Escuela de Bachilleres, señaló que esta iniciativa forma parte de un modelo que se implementa en la actualidad en la Licenciatura y el Posgrado que se ofrecen en el Campus.

Por su parte, la Dra. Rosalía Ocampo Velázquez, coordinadora de este espacio académico, aseguró que todos los alumnos de la Ingeniería Agroindustrial cuentan con algún tipo de apoyo y trabajan en proyectos de investigación. Indicó que se pretende vincular las los conocimientos con el trabajo de campo, para que también haya un aprendizaje práctico.

El Plantel Amazcala de la Escuela de Bachilleres es de reciente creación y en la actualidad cuenta con una plantilla de seis docentes para atender a su primera generación.

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