Chivas ya está listo para su primer duelo de liguilla ante el América en Guadalajara. El Rebaño quiere aprovechar esa inercia futbolística que le dio para cumplir con un buen torneo Clausura en su fase regular y plantarse con autoridad en las semifinales.
Raúl López, lateral de los tapatíos, manifestó que de ninguna manera su equipo cambiará su filosofía de juego en sus primeros dos compromisos de la fiesta grande.
“Siempre habíamos notado que el equipo estaba jugando bien, trabajando con una misma idea a partir del cuerpo técnico que siempre le gustó ser muy ofensivo y por eso se nos fueron dando los resultados. Ya estamos en liguilla, sabemos que será complicado lo que se nos viene pero confiados en que nuestro trabajo, nuestra idea siga rindiendo frutos”, dijo.
Es una realidad que Chivas juega con desparpajo, aún conscientes de que no son un plantel tan basto como quizás si lo es América, su rival en turno en cuartos de final. Sin embargo, López considera que la unión de grupo, también puede ser un factor extra que les dé para seguir adelante sobre el conjunto americanista.
“La verdad, antes había mucha frustración en el grupo, pero lo que nos motivó es que siempre estuvimos unidos, trabajando sin diferencias, nunca se quiso cambiar nada y por otro lado el esquema siempre es el mismo y eso nos ha dado una pauta importante”.
El que Guadalajara y América se vean las caras en instancias de finales, es casi igual de raro que el apodo de Dedos, mismo que tiene el propio Raúl López y que acepta con humor, pues la historia de cómo surgió dicho sobrenombre, fue gracias a la creatividad de sus compañeros de futbol en la infancia .
“Cuando era niño, jugando en Chivas, había otro Dedos mayor que yo. Él tenía 12 y yo diez. Pero él era el original Dedos, sólo que me parecía a él físicamente y siempre decían que éramos hermanos, lo que propició que me echaran carrilla diciéndome el Deditos. Sólo por eso ahora me dicen el Dedos.
HACE NUEVE AÑOS
Fue en el Clausura 2007 cuando americanistas y tapatíos se vieron las caras en una liguilla (hace nueve años). Las Chivas eran las campeonas defensoras y favoritas para repetir platillo. Sin embargo, enfrentaron al América en semifinales y el conjunto de Luis Fernando Tena se llevó un par de victorias por el mismo marcador de 1-0. En el partido de ida, celebrado en el estadio Azteca, Salvador Cabañas marcó la solitaria anotación. En la vuelta, en el estadio Jalisco, Ismael Rodríguez dio el tiro de gracia.
Las Águilas pasaron a la final, donde enfrentaron a los Tuzos del Pachuca. El resultado global favoreció al conjunto de Hidalgo, luego de firmar el título con un marcador de 3-2.
Excelsior.