El Sistema Municipal DIF El Marqués, a través de la Coordinación de Desarrollo Comunitario organizó un nutrido concurso de papalotes, al que respondieron 120 niños de diversas comunidades, teniendo como sede la Presa del Carmen, donde estuvo la Presidenta del DIF El Marqués, Rocío Maestre de Vega, encabezando esta actividad.
Maestre de Vega dijo que el concurso de papalotes llamado “El vuelo de las ideas” es una oportunidad para la creatividad y la convivencia familiar, además de que fomenta la práctica de juegos tradicionales entre las nuevas generaciones.
Los niños y sus familiares se dieron a la tarea de elaborar sus papalotes y posteriormente volarlos a las orillas de la majestuosa Presa del Carmen, ubicada en la comunidad del mismo nombre. El jurado calificador, compuesto por el Director del DIF El Marqués, Román Bolaños González, así como por el Regidor, Filemón Guardado Sánchez, Belén Robles Campos, Secretario de Desarrollo Económico y Alejandro Larios Proa, Psicólogo del DIF estatal, tuvieron la difícil tarea de evaluar la originalidad, uso de materiales tradicionales y el vuelo del papalote.
En esta ocasión las autoridades municipales, encabezadas por Rocío Maestre de Vega, entregaron bicicletas, teléfonos celulares y medallas a los seis primeros lugares de la categoría de 6 a 9 años (infantil) y de 10 a 15 años de edad (juvenil), quedando de la siguiente manera: en la categoría infantil, José Eduardo Salinas Castelano de 8 años obtuvo el primer lugar, mientras que el segundo fue para Marco Antonio Ruiz Camacho, el tercero para Valeria Robles Robles, el cuarto para Alan Rojas Valencia, en quinto lugar se posicionó Teresa Padilla Salinas y en sexto Erick Martínez Rivera.
Para la categoría juvenil, estos fueron los ganadores: primer lugar, Mayra Rojas Ruiz de 10 años, Adrián Robles Ruiz en segundo lugar, Heriberto Robles Ruiz en tercer lugar, Mateo Morán Jiménez, con el cuarto lugar y Ángel Balderas Olvera y Luis Soria Aguillón, con quinto y sexto lugar respectivamente.
Para finalizar el concurso de papalotes “El vuelo de las ideas”, se entregó un obsequio a todos los participantes y un refrigerio para mitigar el calor del momento, que también se combinó con un fuerte aire que permitió a los niños volar los papalotes muy alto.