Los festejos de los casi cinco mil aficionados celestes se convirtieron en abucheos, luego de que La Máquina volviera a ser alcanzada en el último minuto del partido ante los Alebrijes. Un empate inesperado (Paco Jémez ya entendió lo que significa cruzazulearla), luego de que el chileno Martín Rodríguez se estrenara con el Cruz Azul, aunque Rolando González se encargó de enfriar el festejo azul.
Las cosas no pintaban mal para los locales, el chileno Rodríguez se estrenó como goleador de La Máquina al realizar una gran jugada en la que entró al área rival, con dos recortes se quitó a un defensa y cuando parecía que el portero achicaba, el número 14 de los celestes definió a un lado del guardameta.
La escuadra local controló el primer tiempo sin muchos aspavientos, no se mostró un poder avasallador, sin embargo, el marcador pudo ser más holgado si el gol de Martín Cauteruccio, anulado por un supuesto de lugar, hubiera contado y un disparo que Richard Ruíz sacó por el lado que se estrelló en el travesaño de los oaxaqueños.
La parte complementaria trajo nuevos bríos para Alebrijes, quienes más con ganas que con ideas futbolísticas lograron tener algunas jugadas que preocuparon por algunos lapsos a la zaga defensiva de los de La Noria. Sin embargo sólo se quedaron en intentos que no pudieron fructificar.
Por su parte los cinco mil aficionados presentes en el coloso de la colonia Nochebuena respondieron ante los embates que padeció su equipo y no dejaron de alentarlo para que se mostrara otra cara en los minutos finales del encuentro.
Tal parece que ese apoyo no surtió efecto y, fiel a su estilo, Cruz Azul se dejó empatar en el minuto 90 con anotación de Rolando González, quien hizo estallar los abucheos de los seguidores celestes.
Excelsior.