El cineasta español Pedro Almodóvar se apoderó de la alfombra roja de la película Julieta, que presentó en el Festival de Cannes, y que en la proyección de prensa, por la mañana, obtuvo aplausos.

Durante la presentación del filme el manchego habló de que no es una “vaca sagrada”, de su carrera, de que extraña los años 80 y hasta de los #PanamaPapers.

Como el mejor torero español, eludió esta controversia al asegurar que él y su hermano y socio Agustín son solamente personajes secundarios del escándalo que sacudió al mundo económico. El silencio llenó la sala de conferencias cuando, durante la presentación de su vigésimo filme, un periodista inglés le pidió una respuesta sobre el tema.

En los Papeles de Panamá, mi nombre y el de mi hermano es el de unos meros figurantes. Es decir, si los Papeles de Panamá fueran una película, el nombre de mi hermano y el mío, no aparecería porque somos figurantes, extras, sin palabra”, pronunció el laureado realizador, quien culpó a la prensa española de las acusaciones en su contra.

La prensa española nos ha tratado como si fuéramos el absoluto protagonista y eso no es justo. Hay tantos nombres detrás (de los #PanamaPapers) que aún no se sabe cuál es el asunto, porque aún no se ha llegado a investigar lo suficiente. Lo importante es que a ti no te ha impedido ver la película, incluso te ha gustado, así es que eso espero del resto del público”, añadió Almodóvar con elegancia, provocando la ovación de los representantes de los medios de comunicación.

El director aseguró que extraña con locura sus años de juventud, y aceptó que ha empezado a sentir los embates del tiempo.

No es que me sienta un viejo, pero estoy en ello. La vejez no es una enfermedad, sino una masacre, como decía un autor. No soy nostálgico y no sé si esto es una contradicción, pero echo de menos muchísimo mi juventud y la época que me tocó vivir, que son los años 80.

Estoy en un momento en el que he tenido que decidirme por una cosa tan aburrida como la salud y esa decisión, es necesaria si quieres seguir trabajando, pero es una decisión triste. Y esa sensación impregna las obras que estoy haciendo en esta década de mi vida”, detalló con pesar.

Aseguró que, a diferencia de otros directores consagrados él puede participar en la competencia oficial porque no es “una vaca sagrada”.

Yo, de momento, no tengo el talento ni de Woody Allen ni de Steven Spielberg”, cineastas que llevaron al festival sus recientes filmes, pero fuera de competencia. Ya que vienes a Cannes, yo prefiero hacerlo en competencia. La película la van a ver los periodistas, va a recibir criticas y prefiero estar en competencia porque es más excitante, demuestro que no soy una vaca sagrada, vengo a estar a la altura de las películas de competencia.”

Además de asegurar que es una “ama de casa”, Almodóvar narró que con Julieta buscó hacer “un drama contenido” y pidió a los presentes que se encargaran de que, en un futuro, nadie haga una cinta biográfica sobre su persona.

Yo no he escrito ninguna autobiografía y he prohibido a todas las editoriales que escriban nada biográfico sobre mí y lo pondré en mi testamento también. No quiero biografías ni autorizadas ni no autorizadas y les pido a ustedes, que son los periodistas del futuro, por favor no permitan que nadie haga un biopic sobre mí. Es un compromiso que les pido adquieran desde este instante.

Mi vida está en estas 20 películas. Yo podría hablar de ella a través de momentos de mis películas”, finalizó.

Julieta es protagonizada por Emma Suárez y Adriana Ugarte.

MÉXICO, A ESCENA
En una edición en la que México no tiene películas en las secciones principales del Festival de Cannes, los nuevos talentos han salido a dar la cara.

Se trata de los cortometrajes Dobro, de Marta Hernaiz Pidal, y Las razones del mundo, de Ernesto Martínez Bucio, que hoy se exhibirán en la sección Cinefundación, reservada para los trabajos de menos de 30 minutos provenientes de escuelas de cine de todo el mundo.

Es un sueño estar en Cannes, más este año que somos dos producciones representando a México. Estoy sorprendida por la atención y el trato que nos han dado acá”, expresó Hernaiz en entrevista.

Estudió cine en la escuela del cineasta húngaro Béla Tarr, donde recibió clases de Carlos Reygadas, Gael García Bernal y Pedro Costa, entre otros, tras lo cual decidió rodar el trabajo que hoy la tiene aquí.

Es un corto sobre la soledad y las diferencias sociales. Sobre dos personas que no pueden convivir en un mismo entorno, de una manera local, en el que traté de reflejar un problema muy importante en el mundo que son los inmigrantes”, señala Hernaiz sobre la coproducción de 15 minutos entre Bosnia-Herzegovina-México.

Dobro fue fotografiado y producido por Jorge Bolado, contó con actrices no profesionales y está hablado en bosnio, aunque la directora no domina el idioma.

No hablo bosnio y las actrices no hablan inglés. Así es que tenía que pensar en español traducir al inglés y luego decirle a una amiga que traducía del inglés al polaco y luego de ahí se los decía a las actrices en un bosnio muy limitado. Fue toda una aventura que me enseñó que el cine consiste en la confianza que puedas tener y en la que tu equipo tenga en ti”, añadió Hernaiz, quien está en la posproducción de su primer largometraje, La caótica vida de Nada, que también rodó e0n Bosnia.

Es la historia de una madre soltera, un poco despistada que se entera que su hija tiene autismo, y que está harta de su situación emprende un viaje a los Balcanes”, agregó, no sin antes asegurar que a Cannes no viene a competir sino, a disfrutar.

Excelsior.

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