Ahora, díganme míster”, dijo Francisco Palencia cuando se presentó a su primer entrenamiento en Pumas. Se alejó de México para prepararse como técnico en España y regresó a la Liga MX como el timonel más novato de los ocho que están en la liguilla, y se juega el pase a las semifinales contra uno de los entrenadores más experimentados, Ricardo Ferretti de Tigres, que tiene 27 fases finales en su historial.
No, no me intimida que Ferretti tenga más experiencia, cómo creen que me voy a intimidar por eso. Disfruto día a día mi carrera, creo que esas comparaciones las hacen ustedes. Al final todos los técnicos sabemos, tengas o no experiencia, que los que ejecutan son los jugadores y también va en cuestión de lo que les hayas transmitido en el entrenamiento. A la hora del partido ya no les puedes transmitir nada. No va mucho la experiencia, sino cómo desarrollen los jugadores la idea de juego”, dijo Palencia, antes de partir a Monterrey para jugar la vuelta contra los Tigres.
Al inicio del Apertura 2016, tres técnicos iniciaron su carrera en el banquillo: Ricardo Valiño con Puebla, Hernán Cristante con Toluca y Francisco Palencia con los Pumas. El que lleva la delantera es el timonel de los universitarios, el único de los tres que clasificó a la liguilla. El de los Diablos Rojos se quedó a una victoria de la fase final del torneo y el de La Franja pelea por evitar el descenso.
Día a día me gusta ir mejorando, no soy una persona que se estacione. Siempre hay cosas buenas, que uno tiene que aprender y evolucionar, pero del día uno a hoy, ha cambiado mucho. Mi primera incursión fue en el San Cugat de Cataluña, ahí tenía chicos de Sub 20 y juvenil A, aprendí mucho. En la Primera División creo que he tenido una preparación a pasos agigantados, todos los jugadores tienen más calidad, pero son más receptivos”, dijo el técnico de 43 años.
Palencia, siempre práctico, nunca se complicó el camino como técnico. Habló claro el día que se entrevistó con los medios: “Hay tres objetivos: a corto plazo es sumar 24 puntos en el Apertura 2016. A mediano es clasificar a la liguilla y a largo es ser campeón. Todo lo vamos a hacer dándole prioridad a la cantera”. En cinco meses, el Gatillero cumplió dos de las tres metas que se impuso y todavía puede cumplir la tercera.
Tuve un gran debut, enfrentamos a dos equipos grandes, uno en casa (Chivas) y otro de visitante (Cruz Azul), exequipos en los que jugué y me fue bien. Obviamente ahí no jugaba el equipo como queríamos. Ahora creo que el lograr el objetivo a mediano plazo, que era la liguilla, y cumplirlo con autoridad, 27 puntos, nos ilusiona con la posibilidad de ser campeones”.
Excelsior.