Cuatro encuentros le quedan por disputar a los Gallos Blancos y cada uno de ellos significa estar un paso más cerca de la Liguilla. Mañana jugarán la primera de estas cuatro finales en contra del América, actual líder de la competencia y único calificado hasta el momento. En Queretaro son conscientes de la importancia de este encuentro, pues en caso de una derrota, prácticamente quedarían descalificados por la cuestión de los puntos.

«Es el último chance que tenemos» destacó el técnico de los Gallos, Ignacio Ambríz. «Hemos dejado ir muchos puntos en casa y de visitante no pudimos sumar. Van varios partidos que no ganamos y es la última oportunidad para meternos en Liguilla» declaró el técnico, que ha sido cuestionado por la afición en los últimos juegos debido a la falta de resultados positivos.

Ambríz reconoció que las cosas no están saliendo bien y los focos de alerta están encendidos ya que la Liguilla fue uno de los objetivos que se plantearon al principio del torneo. «No podemos caer en la desesperación, si lo hacemos difícilmente podremos recomponer esto. Tenemos cuatro partidos para mejorar lo que hay que mejorar para estar en Liguilla, de lo contrario sería un fracaso porque para consolidar el proyecto necesitamos caloficar».

La mala racha de los Gallos coincidió con la llegada de Ronaldinho al equipo. Sin embargo, el técnico queretano no lo ve más que como eso, una coincidencia, y aseguró que el brasileño pronto estará en el nivel óptimo y las cosas buenas llegarán para el Querétaro. «Viene la parte buena de Ronaldinho y va a aportar cosas buenas. Las cosas se van a arreglar y tendremos Muchas alegrías».

Aunque el América ya logró su clasificación a LiguiLiguilla, Ambriz pidió mesura y no confiarse, pues las Águilas son un equipo complicado en cualquier circunstancia y que seguramente buscará sumar puntos para mantenerse líder de la competencia.»Son partidos que debemos hacerlo perfecto. Debemos estar muy concentrados, jugar como no lo hemos hecho, con orden e intensidad».

Por último, puntualizó que la separación de unos jugadores del resto del grupo hace dos semanas no es razón para afectar el rendimiento del conjunto, pues son dos temas distintos y quienes permanecen saben lo que está en juego y están comprometidos con ello. «El grupo está unido, consciente de que nuestros errores nos han costado goles.Pero mañana tenemos muy buena chance de ganar y esto lo vamos a sacar como equipo»concluyó Ambríz.

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