Tijuana BC Frontera Info.-Alrededor de 32 hombres y mujeres de distintas partes del País cruzaron sin documentos migratorios la frontera a Estados Unidos a través de la Garita de Otay para solicitar al Gobierno de Barack Obama su permanencia legal.
El cruce masivo de personas indocumentadas se realizó este lunes a las 11:00 horas en un acto en donde decenas de deportados comenzaron a reunirse para participar del movimiento.
El objetivo era ser detenidos para que así se determine su situación y puedan mostrar sus papeles que prueban residencia en Estados Unidos.
Aproximadamente a las 10:30 horas, el sitio donde se citó a los interesados ya se encontraba repleto de representantes de los medios de comunicación de México y Estados Unidos.
El primero en llegar fue Martín Jesús Sustaita, quien se enteró de lo que se llevaría a cabo, por lo que decidió unirse.
Parado junto a sus maletas explicó que después de tres décadas de residencia en Estados Unidos, quiso regularizar su situación legal, iniciando un proceso que culminaba con la entrega de su residencia en Ciudad Juárez.
Al llegar para recoger su “green card”, las autoridades le dijeron que no podría regresar en al menos un año, dijo, porque su trámite no procedía.
Han pasado dos años y el abogado aún no puede regresar a casa con su esposa, dos hijas y cuatro nietos, además de toda una vida forjada en la nación norteamericana, expresó mientras mostraba los documentos de su trámite.
Antes de que llegara el grupo completo, en la garita se encontraban representantes de organismos pro derechos humanos para vigilar que todo se diera de manera pacífica.
El coordinador del programa fronterizo del Comité de Amigos, Benjamín Prado, indicó que en los otros intentos de cruce no hubo violaciones a los derechos humanos, sin embargo, es necesaria la presencia de observadores.
Llegan en camión
A las 10:55 horas arribó el camión que transportaba a los llamados “dreamers”, familias y sus acompañantes, quienes se estacionaron a unas cuadras de la garita.
Allí descendieron del vehículo para conglomerarse en la banqueta y comenzar con la manifestación que proclamaron como pacífica.
“Sin papeles, sin miedo” expresaban al unísono las familias y jóvenes vestidos con togas de graduación que se encontraban allí, muchos de ellos contando sus historias de vida a los presentes.
A las 11:28 comenzó su recorrido hacia la garita y al andar, sus compañeros comenzaron a darles palabras de aliento, otros, incluso, a despedirse de ellos por la separación que inicia y termina en la frontera.
La marcha era liderada por Alex Aldana, organizador del movimiento e integrante del grupo Alianza Nacional Juvenil Inmigrante, quien declaró que no es el primer cruce de este tipo que se realiza.
Todo empezó en julio de 2013, precisó, con el cruce de nueve jóvenes, después hubo otro movimiento en septiembre con 30 personas, sin embargo, este es el más grande con 152 familias que intentarán regresar a Estados Unidos.
El motivo principal de la movilización es reunir familia, demostrando que la reforma empieza desde el otro lado de la frontera, dijo.
Mientras los dreamers se encontraban en la garita, una decena de oficiales de Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) cubrieron los carriles del acceso Sentri de la garita automovilística, vialidad por donde se acercaron los manifestantes.
Justo antes de las 12:00 horas, comenzaron a cruzar los primeros dreamers, alientados por sus familias y amigos que se quedarían del lado mexicano, algunos de ellos con la esperanza de pasar en los siguientes intentos.
Los oficiales de ingreso a las instalaciones de la garita revisaron a los que cruzaron, sin pasar por alto una primera revisión de los documentos que, en su mayoría, portaban.
A lo lejos se escuchaban los gritos de apoyo de quienes dirigieron el movimiento del lado de Otay Mesa en Estados Unidos, mientras algunos se saludaban entre ambos lados de la frontera agitando sus brazos desde lejos.
Dividen cruces
Alex Aldana, organizador del movimiento informó que el centenar de familias cruzará en una serie de intentos que tendrán como duración tres días.
Aún no se sabe por donde se realizarán los otros cruces, puntualizó, sin embargo, serán en la ciudad de Tijuana.
Las 152 familias proceden de distintos estados de la república, precisó, como Veracruz, Guanajuato, entre otros.