Arabia Saudí aseguró el domingo que desmanteló dos complots terroristas: en uno, miembros del autodenominado grupo Estado Islámico iban a matar a policías, y en otro, un vehículo cargado con explosivos iba a estallar en un partido de fútbol con los Emiratos Arabes Unidos.
El anuncio, realizado por el Ministerio del Interior, surge en momentos en que Arabia Saudí enfrente la actividad de un grupo vinculado al EI, y tensiones en sus regiones orientales donde predomina la secta chií.
En el primer ataque planeado, un grupo de asaltantes iba a matar a policías en la provincia oriental de Shaqraa, dijo el ministerio en un comunicado reproducido por la agencia oficial de noticias. Añadió que cuatro saudíes que recibieron instrucciones de un dirigente del EI radicado en Siria fueron arrestados antes de que pudieran realizar el ataque.
La segunda acción involucraba la colocación de un carro-bomba en el partido entre Arabia Saudí y los Emiratos Arabes Unidos en un estadio en Yida, dice el comunicado. Añade que dos paquistaníes, un sirio y un sudanés fueron arrestados el 10 de octubre, el día antes del encuentro deportivo.
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