Una caricatura publicada por la revista satírica francesa «Charlie Hebdo» que imagina un futuro en el que un niño sirio que murió ahogado se convierte en un acosador de mujeres en Alemania generó hoy una ola de críticas en Internet.

En la viñeta, un hombre caricaturizado como un cerdo persigue con las manos estiradas a una mujer que huye. En en un círculo se ve un dibujo que reproduce la imagen del pequeño Aylan Kurdi, ahogado en una playa y que se convirtió en un símbolo del sufrimiento de los refugiados. Al lado, se lee: «¿Qué hubiera sido del pequeño Aylan si hubiese crecido? Un acosador de mujeres en Alemania».

La sátira alude a lo ocurrido en Nochevieja en Colonia, Alemania, donde grupos de hombres al parecer norteafricanos rodearon, acosaron y les robaron sus pertenencias a las mujeres que pasaban por la estación central de trenes.

Muchas personas respondieron en las redes sociales al empezar a conocerse la viñeta. «‘Charlie Hebdo’ nos recuerda que está bien ser racista si uno dice que es una sátira y que defiende la libertad de expresión», escribió en Twitter un usuario que se hace llamar Not Chris Taylor.

«Espero que algún día haya guerra en su país y que tengan que abandonar su patria #racist #charliehebdo», señaló por su parte la usuaria Mine Iseri, cuyo perfil señala que vive en Turquía.

Otros en cambio defendieron a la revista. «¿Me están diciendo que la gente toma una crítica de #CharlieHebdo al racismo francés como una promoción del racismo francés? ¿Otra vez?», escribió desde su perfil Alex Rowell, residente en Líbano.

La revista ha sido criticada muchas veces por mostrar viñetas consideradas ofensivas y se convirtió en blanco para los islamistas por publicar dibujos del profeta Mahoma considerados blasfemos. En enero de 2015, dos hombres armados entraron en la redacción y mataron a 11 personas, entre ellos algunos de los caricaturistas más destacados de «Charlie Hebdo».

Claas Weinmann, que según su perfil trabaja en el diario alemán «Bild», comentó: «La caricatura duele. Pero nos pone un espejo de aquellos para quienes Colonia es un resultado de la crisis de refugiados».

Aylan, de tres años, su hermano Ghaleb, de cinco, y su madre se ahogaron tratando de llegar en bote a la costa de Turquía en septiembre. La fotografía del niño boca abajo en una playa dio la vuelta al mundo.

 

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