La Secretaría de Salud del estado de Querétaro comparte información sobre la varicela, infección viral contagiosa, que afecta, por lo general, a niñas y niños en edad escolar. En la mayoría de los casos con un manejo adecuado no tiene complicaciones y no deja secuelas.

La varicela es causada por un herpesvirus, cuyo único reservorio conocido es el hombre. Solamente se conoce un serotipo. El virus penetra en el huésped a través de la mucosa nasofaríngea y provoca, casi invariablemente, la enfermedad clínica en las personas susceptibles. El periodo de incubación suele ser de10 a21 días.

El cuadro clínico inicia con fiebre moderada y malestar general, erupción en piel que afecta cuero cabelludo, cara, tronco, extremidades y en ocasiones a las mucosas. En pocas horas se convierten en ampollas, las cuales se rompen de manera espontánea, dejando pequeñas lesiones ulcerativas, que finalmente se convierten en costras. Las lesiones producen mucha comezón y aparecen en brotes sucesivos, por lo que en un momento dado el paciente tendrá lesiones en los distintos estadios; la fase eruptiva dura alrededor de una semana.

La infección se produce por contacto persona a persona, a través de secreciones respiratorias o de las lesiones, o de manera indirecta por contacto con objetos contaminados por secreciones de pacientes infecciosos; los pacientes pueden contagiar desde uno a dos días antes de la erupción, hasta que todas las lesiones se han secado; las costras no son infectantes.

La infección en adultos -por lo general- tiene manifestaciones más intensas; en un pequeño porcentaje de la población puede originar cicatrices permanentes o complicaciones graves como meningitis, neumonías o infecciones en piel (secundarias a rascado). La frecuencia de estas complicaciones es mayor en adultos o en personas inmunodeprimidas -con VIH/sida, cáncer, leucemia, quienes reciben corticosteroides sistémicos, etc.-.

La incidencia de casos de varicela en el estado de Querétaro en 2016 fue de una tasa de 1.5 casos por cada 100 mil habitantes. Hasta la semana epidemiológica 06 de 2017 se han registrado 512 casos, lo que significa una tasa de 0.25 casos por cada 100 mil habitantes, siendo el grupo de edad más afectado el de5 a14 años.

Entre las medidas de control se encuentra el aislamiento de pacientes durante el periodo en que son infecciosos y reducir la posibilidad de infección en personas de riesgo, en particular embarazadas, recién nacidos e inmunodeprimidos; excluyéndoles de la escuela, trabajo, lugares públicos o cualquier otro sitio de posible contacto, hasta que las vesículas sequen.

Otras recomendaciones son mantener en vigilancia médica a los pacientes, con el fin de detectar complicaciones de forma oportuna, baño diario, evitar el rascado, uñas recortadas, lavado de manos frecuente.

Los casos de varicela deben ser notificados a las autoridades de salud para la vigilancia epidemiológica, proteger a los contactos y evitar la propagación del virus.

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