Ante una incesante lluvia y en una cancha en mal estado, Cruz Azul consiguió una victoria agónica por marcador de 2-1 ante Tigres en la Copa MX, llegando a 15 partidos sin conocer la derrota con Paco Jémez.
Desde el silbatazo inicial se pudo observar que los futbolistas de ambos equipos tuvieron dificultades con la gran cantidad de agua que se encontraban en el césped, cayendo al suelo en constantes ocasiones y realizando entradas desmedidas debido al poco o nulo control en sus barridas.
André-Pierre Gignac fue el encargado de darle la tranquilidad a los universitarios a los 23 minutos de juego. Luego de recibir un pase del ‘Chaka’ Rodríguez desde media cancha, el francés quedó solo dentro del área para definir ante la salida de Guillermo Allison, rompiendo las redes con la primera anotación del partido.
Para la parte complementaria, todo parecía ir con normalidad hasta que ocurrió un fuerte suceso en el minuto 50 que generó preocupaciones entre ambas escuadras.
En un forcejeo, el juvenil del Cruz Azul, Víctor Zúñiga, salió disparado hacia fuera del campo, haciéndole imposible poder detenerse por lo mojado de la cancha, lo que le originó un fuerte golpe en el cuello con una silla de uno de los elementos de seguridad, quedando inconsciente por algunos segundos ante la rápida respuesta de sus compañeros y los médicos del estadio, recibiendo los primeros auxilios para descartar alguna gravedad tras el impacto que sufrió.
Zúñiga salió de cambio por Cruz Azul, recuperándose en ese instante y tranquilizando a todos los presentes en el Estadio Azul.
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