El acero suele pesar en los Playoffs y Peyton Manning ya lo sufrió en la temporada 2005, cuando tras llegar como primero de la AFC con los Indianapolis Colts, los Steelers de un joven Ben Roethlisberger lo alejaron del sueño de ganar un Super Bowl.

Año tras año, Manning y sus Colts veían como se esfumaban sus posibilidades de un título. El Peyton dominante de la fase regular no lucía en la postemporada y cuando sí lo hacía, aparecían los Patriots de Tom Brady para arruinar la fiesta.

Hasta el 15 de enero de 2006, el récord de Manning en Playoffs era de 3-5. Llegaba una nueva oportunidad y como primeros en la AFC, los Colts eran favoritos ante los Steelers, sextos sembrados.

Pero Pittsburgh estaba enrachado, con cinco victorias consecutivas, incluida una de visita en la ronda de «Wild Card» ante Cincinnati Bengals.

Entonces, «Big Ben» tenía apenas 23 años y afrontaba su segunda temporada como profesional. Mientras que Manning ya había coleccionado seis selecciones al Pro Bowl y dos premios MVP de la liga.

Toda la experiencia de Manning no pesó y la historia fue de nuevo una decepción para los fans presentes en el RCA Dome de Indianapolis.

Pittsburgh dominó los primeros tres cuartos para ponerse 21-3 antes del periodo definitivo, gracias dos pases de TD de Roethlisberger y una corrida de anotación de Jerome Bettis, ahora miembro del Salón de la Fama.

La defensa también hizo su trabajo al capturar cinco veces a Manning y secar a la ofensiva durante gran parte del encuentro.

Manning quiso liderar una remontada memorable en el último cuarto y con un pase de TD de 50 yardas a Dallas Clark, dio esperanza a la fanaticada local.

La locura llegó al RCA Dome cuando los Colts timbraron de nuevo en la zona de anotación, con un acarreo de seis yardas de Edgerrin James, cuando restaba 4:24 en el reloj de juego, tiempo suficiente para concretar la voltereta.

EL MILAGRO DE ‘BIG BEN’

Pero Roethlisberger tenía otros planes. En 1er y gol desde la 1 de Colts, Gary Brackett provocó un fumble de Bettis, Nick Harper se llevó el balón y la gente en las gradas ya celebraba el TD, pero «Big Ben» apareció para hacer la tackleada de su vida.

Manning fue incapaz de poner a su equipo en posición de anotar TD y el partido quedó en manos del pateador Mike Vanderjagt, quien falló de 46 yardas ante la mirada defraudada de todos los presentes.

Una década y muchas heridas de guerra después, Manning enfrentará de nuevo a los Steelers en postemporada, ahora con el jersey de Denver. Una vez más es el primer sembrado contra el sexto, aunque Roethlisberger podría no estar en el emparrillado y si juega, lo hará limitado por una lesión de hombro.

FuenteMedio Tiempo
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